por Gabriel Holand
Los momentos previos a que un probable evento negativo suceda suelen ser los peores, por ejemplo un estallido o una mala noticia, porque la incertidumbre nos genera gran ansiedad.
Pues la mala noticia ya la conocemos. Porque, más allá del nombre que se le quiera imponer, los montos correspondientes a los vencimientos de la deuda soberana depositados por el gobierno se quedaron a medio camino sin llegar a los bolsillos de los acreedores.
En otras palabras: el dinero se puso a disposición pero al “cajero pagador” que debía entregarlos –es decir el BONY- se le prohibió abrir la ventanilla. Entonces los inversores se quedaron sin su dinero.
Y esta situación, entre otras contingencias, disparó la esperable caída en los precios de los activos financieros de nuestro país tanto como el pago de los seguros que protegen a los inversores globales, ante los impagos de los deudores. Y conocidos como Crédito Default Swaps (CDS).
Hechos que muestran las primeras consecuencias del default que ya se sienten en los mercados globales.
Así mismo se activó el riesgo de Cross default. Y esto implica el riesgo que el pago de todos los títulos de nuestra deuda soberana emitida bajo ley extranjera, incluidos los que vencen a futuro, se hagan exigibles hoy.
En otras palabras los bonos Par, Discount y Global tienen cláusulas que, para decirlo claramente, habilitan a sus tenedores exigir la cancelación del capital ante una contingencia como la que sucedió el 31 de julio. Y esto representa unos USS 34mil millones que habría que pagar por tal concepto. Simplemente una misión imposible.
Hasta aquí describimos los hechos de impacto financiero que se desataron durante los últimos tres días.
Y ahora daremos algunas opiniones acerca de que puede hacer el inversor global ante el escenario mencionado para proteger su capital.
- En primer lugar diversos analistas coinciden en que el valor del dólar oficial puede variar a mayor velocidad que hasta ahora. Por tanto aquellas personas que tiene ingresos registrados y cuenten con autorización de AFIP pueden adquirir hasta el 20% de los mismos en dólares billetes a un precio de $8,25, si se dejan depositados durante un año en una entidad bancaria, o $ 9,90 si la divisa norteamericana se retira en el mismo momento de adquirirla.
- Para quienes deseen mantenerse con la adrenalina al tope en los mercados financieros podemos hacer algunos comentarios.
- Hasta que el escenario se clarifique del todo, y esto puede llevar meses, la variación de los precios en los activos financieros, sobre todo acciones, se mantendrá muy alta incluso dentro de una misma rueda accionara.
- Ejemplo: La acción de YPF el día viernes 1 de agosto en la bolsa de New York tocó USS 35,37 para luego bajar a USS 32,68 y más tarde subió a USS35,33 para cerrar a USS 34,23. Es decir que bajó casi 8% luego subió en igual porcentaje para volver a descender 3%.Y estos son los porcentajes que ganaron/ perdieron aquellos grandes jugadores que encauzan los valores en el mercado en un juego que, parece, difícilmente puedan practicar la mayoría de los apostadores pequeños o medianos.
En el mercado de bonos :
Quizás un nuevo grupo de buitres ya vean que el bono Par vale USS55/56 y, si se dispara la cláusula de aceleración -Cross default- pueden reclamar por USS 100 sin esperar los 24 años que faltan para su efectivo vencimiento. A la vez, y por su bajo precio, si las cosas se arreglan serán los que más vean crecer su valor.
Sin embargo desde el punto de vista de los rendimientos los Discount 33 leyes New York tiene hoy un rendimiento mayor al 10%, lo cual los vuelve atractivos en caso de arribarse a una solución.
Por tanto aquellos que decidan jugar fichas por estos días mejor recuerden que el único común denominador a todas las opciones para invertir es la incertidumbre.es decir algo más parecido a un juego de ruleta rusa antes que a la tradicional partida de póker que suele verse en los mercados financieros.
Pubicado en DiarioBae.com